VOTOS VS. DERECHOS

“Mientras ustedes piensan en votos, nosotras en derechos”

Las mujeres nos hemos convertido en actoras clave en el proceso electoral y la vida pública de este País. No solo porque constituimos el 52% de padrón electoral, también porque estamos siendo la resistencia en las calles, las redes sociales, los parlamentos, y todos los espacios sociales donde existen voces con perspectiva de género.

Sumado a esto, tenemos al bloque feminista que avanza por América Latina y que tiene más visibilidad que nunca, gracias a la agenda digital que encabeza.

Bien dice Jane Jaquette “La creciente participación y representación de las mujeres en la política es uno de los desarrollos más notables de fines del siglo veinte”

Finalmente las mujeres de todos los sectores estamos uniéndonos y volviéndonos sujetas políticamente activas, sin importar la clase, puesto que ocupamos, condición, etc. Porque hay comunes denominadores que nos unen: No más violencia contra las mujeres, no más desigualdad.

Las movilizaciones y apropiación de los espacios públicos son un fenómeno que si bien no es nuevo, si está marcando la agenda política de México.

Y es que sabemos que cuando las mujeres nos unimos en una misma voz los cambios sociales comienzan a suceder. Las protestas organizadas parece han llegado para quedarse ante la falta de atención de este segmento de la población.

Como nunca antes en la reciente historia de México, hemos visto un atraso en los pocos adelantos que las mujeres habiamos logrado a favor de nuestros derechos. 

2021 no pinta nada prometedor para las mujeres en dos sentidos: presupuestos y representación. Recortes al presupuesto que fortalece la atención, prevención y erradicación de la violencia, sumado al recorte del anexo 13, pasando por la reducción del presupuesto a los refugios para mujeres y qué decir de los derechos de las niñas que siguen siendo el sector más olvidado por el Gobierno. Solo hay que mirar las cifras escandalosas de los embarazos no deseados de niñas de 10 a 14 años, entre muchos otros.

Y la representación política de las mujeres,  donde se abre la pregunta ¿paridad para qué? Mientras no exista un profundo compromiso con las agendas de derechos de las mujeres, la dimensión numérica solo será un gran maquillaje que diluirá las dimensiones simbólicas y sustantivas de la paridad real.

Sin duda el activismo político de un frente amplio de mujeres logrará transformar la vida pública de México, porque mientras ustedes piensan en votos, nosotras en derechos.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Scroll Up